Reflexión Personal

La intención y el objetivo de este portafolio es primero, hacer una reflexión del proceso que van viviendo las alumnas en la adquisición de la lecto-escritura, ese es mi interés al reunir y analizar  los trabajos más representativos del ciclo escolar.

Estoy convencida que el promover un ambiente de confianza, seguridad y éxito da a las niñas las herramientas que necesitan para expresar, investigar y compartir sus dudas, conocimientos y experiencias que viven dentro y fuera del aula escolar.

Es por esto que durante las primeras semanas de clase las alumnas tienen actividades que les permiten y ayudan a organizar, identificar, explorar su colegio y salón de clase, pero sobre todo, establecer lazos de afinidad con sus compañeras,  profesoras y personal del Colegio.

Promover en las alumnas la alegría y el deseo de asistir al Colegio, saber que cada trabajo, dibujo o trazo que realicen es muy valioso, sobre todo  porque ese trabajo ya fue ofrecido al inicio de clases, darle un valor sobrenatural y un sentido al esfuerzo tiene sus recompensas.

Durante el proceso de lecto-escritura, la alumna que se encuentran en las primeras etapas, tienen la confianza de que leer es divertido, esta seguridad le permitirá descubrir nuevas historias; disfruto mucho ver que una alumna al momento de ir al Rincón de Lectura, los primeros meses elige sólo aquellos cuentos de dibujos grandes, cuando se da cuenta que ya puede leer algunas palabras, frases y párrafos, empieza a decidir por los cuentos de mayor contenido de texto.

Ir analizando e identificando durante  las sesiones diarias, diferentes formatos de textos con intención muy diferente y definida de cada uno, hace que en su casa y comunidad los busquen, trate de leer, entender y enterarse de lo que tratan; es decir la lectura y escritura tienen un sentido informativo y recreativo para la niña, desea leer y lo más importante, lo va logrando por ella misma a su propio ritmo, lo cual permite que tenga experiencias de éxito, cuando me comentan “Ya se leer, mira aquí dice….”

Esto hace que la forma tradicional de enseñar a leer (de planas y repeticiones de palabras que no le representan o significan nada) ya queden en el pasado. Como docentes tenemos el compromiso de formar niños felices, que se sepan capaces de imaginar, crear, inventar cuentos, diálogos, canciones, como mi alumna que cuando vimos el tema de la canción, a los dos días me entregó unos versos escritos por ella.

Redactar cuentos, usar la tecnología, estar en comunicación con los que escribieron los cuentos que están leyendo, conocer la historia de esos escritores, hace que la lectura no sea algo distante, al contrario se convierte en una actividad cotidiana y que le permite descubrir nuevas cosas y horizontes día a día. Mariana, otra alumna, llegó a la clase y comentó “Ayer mi mamá y yo leímos una nota informativa pues queríamos investigar sobre el pez Beta”. Su vocabulario se enriquece, el interés de aprender es constante.

Por otra parte, para mí, ha sido un reto enriquecedor, el organizar esta información usando herramientas tecnológicas que no dominaba, durante este periodo, me ha ayudado a utilizar nuevas estrategias de comunicación.

Deseo que este portafolio sirva para compartir mis experiencias, sirva de guía para otros proyectos y me encantaría leer sus comentarios.

Quisiera terminar con una frase que  me motivó a seguir dando lo mejor de mí:

“A la cima no se llega superando a los demás, sino superándonos a nosotros mismos.”

Profa. Patricia Salazar Llanos.